Relatos y crónicas

Para Lucky Tovar

(Autor: Lewis Romero)

 

Para Lucky Tovar - Lewis Romero

 

 

Amigo Lucky, te fuiste y nos has dejado huérfanos.
Huérfanos no solo de tu presencia, de tu persona, de tu optimismo ante toda circunstancia,  de tu bonhomía, sino también de tus bromas, de tu conversación, de tus chistes, de esas historias que contabas con tanto arte; nos has dejado huérfanos de tus palabras.
Porque tus armas eran las palabras.
Pero tú sabías por qué las palabras daban vueltas a tu alrededor,
las mismas palabras que te estarán rondando en este momento,
las mismas palabras, los mismos pensamientos, los mismos sueños
saltando al furgón, bajando al sur todos en el mismo tren.
En la vida a veces es mejor dejar a un lado el traje gris y vestir de negro riguroso.
Abrir los ojos al viento de Levante y luchar hasta caer muertos.

 

Ahora Lucky, estoy cantando una canción para ti.
Estoy cantando para ti pero ya no puedo cantar más.
No, debo reaccionar y escupir rápidamente las palabras,
golpear ciegamente las paredes y gritar los pensamientos,
intentar pulverizar la rabia sin ningún remordimiento.
Si pudiera sentir que vuelvo a escucharte
una palabra, una canción, una historia,
unos versos de blues en castellano.
Si pudiera hacer latir con fuerza tu corazón malherido,
Si pudiera devolver el golpe…

Pero hoy solo atisbo en la lejanía, una vez más,
sobre el suelo, un bluesman.

Y cualquiera que sea la apuesta sobre la mesa
algo me hace pensar que la has ganado,
que el sitio que ahora ocupas,
el lugar en el que estés sentado,
esperando el momento de salir al escenario,
en el instante previo a tomar el micrófono,
tu voz y tu mirada nadan en las palabras
y te dices: “Vamos”, y vas, y vas con el alma,
y vas con tu coraje y con tu inseparable bolsita de mojo.

Te marchaste, Lucky,
te marchaste, pero en realidad te has quedado para siempre
pues la huella que has dejado no se borrará jamás.

Hasta la vista, compañero.